Lo primero que debes saber es que no existen dietas milagrosas que te hagan perder peso es un corto tiempo. Una dieta correcta te permitirá perder peso progresivamente sin poner en riesgo tu salud.
El IMC es un número que te muestra en qué nivel de peso te encuentras. Este se calcula en base al peso, estatura y edad del paciente, por lo cual da una idea más acertada del estado actual de cada persona.
No todas las dietas funcionan para todas las personas, ya que cada persona se encuentra en un estado diferente de salud al realizar las dietas. Es por esto que es fundamental que la dieta para ti sea realizada tomando en cuenta tu estado de salud actual, requerimientos y gustos para poder así ser eficaz.
Si bien se puede perder peso solo al llevar una dieta saludable, el ejercicio y actividad física ayudara a que este proceso sea más efectivo. No es necesario pasar horas de horas en el gimnasio, pero si cambiar el estilo de vida e incluir más actividades físicas para cada día. Puedes comenzar por realizar caminatas, bailar o realizar ejercicios en casa. La actividad física te ayudara a quemar calorías y mantenerte motivada(o) acontinuar con tu plan nutricional.
Recuerda que tu cuerpo tiene requerimientos para funcionar. La energía para el cuerpo se obtiene de las calorías que se encuentran en la comida que consumes. El dejar de comer creará mayor ansiedad y problemas de salud como gastritis, fatiga y falta de concentración.
El agua contiene 0 calorías y es por esta razón que debemos de constantemente consumirla. El beber agua te ayudara acontrolar la ansiedad por comer y a mantener tu cuerpo hidratado. Se te recomienda beber alrededor de 2 a 3 litros de agua al día.
El secreto en seguir adecuadamente su plan nutricional se encuentra en ser organizado. Para poder cumplir con tu plan nutricional debes de planear los horarios de tus comidas, así como la compra de los insumos para tus platillos y bocadillos. De esta manera podrás mantenerte en el régimen y evitar tentaciones.
Así como las dietas milagrosas tampoco existen cambios milagrosos de la noche a la mañana. Para lograr tu meta final debes primero definir objetivos de corto plazo que puedas cumplir. Por ejemplo, si tu meta final es bajar 20 kilos, no puedes esperar lograr esto en sólo 1 mes. Debes ponerte el objetivo de bajar 2 kilos en el primer mes y seguidamente mantener esta perdida de peso durante los próximos hasta que llegues a cumplir tu meta de perder un total de 20 kilos. Este método de seguimiento de tu progreso te mantendrá en una mentalidad de logros y te ayudará a mantener la positividad para lograr tu meta.
Si bien existe medicación para ayudar con ciertas patologías y enfermedades relacionadas a los problemas de peso, estas no deben ser automedicadas. Tu médico a cargo deberá evaluar si es necesario usarlas además de hacerte saber los efectos adversos. Adicional a esto, el consumo de medicamentos o pastillas que prometen la quema rápida de grasa y perdida de peso deben ser también consultados con tu médico ya que muchos de estos producen problemas más grandes a su salud a largo plazo.
El hipotiroidismo, diabetes mellitus o problemas cardiovasculares, así como a problemas emocionales incluyendo depresión, ansiedad pueden ser los causantes de que no puedas perder peso. Es por esto que previo a iniciar cualquier plan nutricional tu médico debe realizarte una evaluación general para identificar tu estado de salud actual y así tratar posibles enfermedades relacionadas a problemas de peso. Así mismo, la dieta que realices debe ser especial para ti y cualquier problema de salud que puedas presentar.
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